Por primera vez en 25 años pareciera ser que mi país, Venezuela, tiene una oportunidad real de lograr un cambio de gobierno por la vía democrática del voto. Sin embargo, intento no emocionarme y mantener mi esperanza al mínimo. La desesperanza aprendida y la indefensa adquirida ya son parte de mi mecanismo de defensa para enfrentar la realidad de mi país. Hemos pasado demasiadas cosas en los últimos años. No quiero ilusionarme en vano. En mi país, tenemos una relación complicada con las elecciones. Conscientemente, unos días antes de las elecciones me abastecí de alimento, porque uno nunca sabe qué pueda ocurrir, y si algo ocurre lo mejor es que te agarre con alimento en casa. En Catia, el barrio donde vivo, se escucha “compren velas, por si acaso”. Todo parece estar normal, sin embargo, tengo una semana que no logro dormir más de 4 horas en la noche. La ansiedad toma mi cuerpo y trato de poner en práctica todas las herramientas que conozco para gestionarla. Un dolor de cabeza aparec
El 25 de Noviembre de 2016
distintas organizaciones civiles se dieron cita para celebrar el Día
Internacional contra la violencia hacia la Mujer. Reunidos en la Plaza de los
Palos Grandes se conmemoró a todas aquellas mujeres que han muerto a manos de
la violencia, y posteriormente se emprendió una marcha pacífica hasta la Plaza
Francia del Municipio Chacao, Caracas, para reconocer y honrar el papel de la
mujer en nuestra sociedad.
Nuestra sociedad aún marcada
por un machismo histórico y estructural debe tomar el rumbo hacia una sociedad
más inclusiva destinada a lograr la igualdad y erradicar las diferencias entre
los géneros; y los hombres debemos ser parte fundamental de la construcción de
esa sociedad más feminista.
Comentarios
Publicar un comentario